Con una carrera imparable, la artista transformó su talento en un imperio global y rompió récords de ventas, giras y negocios en la industria musical.
Taylor Swift no solo arrasa en las listas de éxitos y llena estadios alrededor del mundo, sino que también hizo historia al convertirse en la cantante más rica del mundo, superando a grandes íconos como Rihanna y Adele. A lo largo de más de una década de carrera, la artista estadounidense transformó su innegable talento en un verdadero imperio.
Su habilidad para reinventarse musicalmente, el control sobre su obra y la conexión con millones de fans la llevó a romper récords tanto artísticos como financieros. Así, desde sus primeros pasos en la música country hasta convertirse en una estrella del pop, logró contratos millonarios con plataformas y marcas. Incluso, el 30 de mayo adquirió los derechos de sus primeros seis álbumes por un valor estimado de 360 millones de dólares tras una larga disputa legal, según la publicación de Billboard.
De chica country a estrella pop global: la historia de Taylor Swift
Taylor Alison Swift nació el 13 de diciembre de 1989 en West Reading, Pensilvania. Estudió en el colegio Wyomissing Area Junior/Senior High School y, al notar su interés por la música, sus padres decidieron mudarse a Nashville, Tennessee, la capital del country, cuando ella tenía apenas 14 años.
Y fue allí donde toda su historia cambió: firmó su primer contrato discográfico con Big Machine Records y lanzó su álbum debut, «Taylor Swift» (2006), que incluía canciones que ella misma había escrito. El disco fue un éxito inmediato, lo que rápidamente la posicionó como una de las promesas más fuertes del género.
Sin embargo, su visión iba mucho más allá y «Fearless» (2008) logró una proyección global, vendiendo más de 12 millones de copias y llevándose cuatro premios Grammy, incluido el de Álbum del Año. Con el tiempo, Taylor supo reinventarse sin perder su esencia: álbum tras álbum, fue explorando nuevos sonidos y evolucionando hacia el pop, un giro que se consolidó con «1989» (2014), su exitoso disco que redefinió su carrera y la convirtió en una superestrella global.
A lo largo de su carrera, Swift vendió más de 200 millones de discos en todo el mundo, una cifra que la coloca entre las artistas más exitosas de todos los tiempos. Con álbumes como «Speak Now», «Red» y «Reputation», fue ampliando su habilidad para contar historias personales, muchas veces inspiradas en sus propias relaciones amorosas y experiencias. Algo que le permitió conectar profundamente con varias generaciones de oyentes.
Pero su camino no estuvo exento de conflictos y en 2019 estalló una controversia cuando Scooter Braun, manager de artistas como Justin Bieber y Ariana Grande, adquirió la productora y con ello, el catálogo completo de sus primeros seis discos. La cantante denunció públicamente que no se le permitió comprar los derechos de sus propias grabaciones y calificó la transacción como un acto de traición.
Lejos de resignarse, tomó una decisión que marcó la historia: en 2021 comenzó a regrabar sus primeras obras bajo el sello «Taylor´s Version» para recuperar el control total de sus álbumes. Esta jugada le fue efectiva no solo desde el punto de vista financiero, sino que también marcó un precedente en la industria musical sobre los derechos de autor y el poder de los artistas sobre su trabajo.
Con sus siguientes álbumes, «Lover», «Folklore», «Evermore», «Midnights» y «The Tortured Poets Department», Taylor supo mantenerse vigente en la escena. Además, ya en la cima de su carrera, la cantante y compositora lanzó «The Eras Tour», su ambiciosa gira mundial que repasa todas las etapas de su discografía.
Estos shows batieron récords de recaudación y su impacto económico fue tal que, incluso, la demanda de entradas para las prestaciones en Estados Unidos superó a Ticketmaster y los miembros del Congreso cuestionaron el control de la compañía sobre las ventas.
Y la gran noticia, es que el pasado 30 de mayo, la artista anunció a través de sus redes sociales la compra de los másteres de sus primeros seis álbumes de estudio a Shamrock Holdings, el último propietario de su música. Este acuerdo pone fin a una batalla por los derechos de su música que duró más de seis años.
Patrimonio actual de Taylor Swift
De acuerdo a la revista Forbes, Taylor Swift posee una fortuna de más de 1.600 millones de dólares. El patrimonio incluye casi 800 millones de dólares en base de regalías y giras, además de un catálogo de música con un valor estimado de 600 millones de dólares y unos 110 millones de dólares en bienes raíces.
Fuente: Ámbito