Sebastián Solé y Pablo Crer fueron durante muchos años la referencia rosarina de los seleccionados nacionales de vóley, además de un ejemplo a imitar para los jóvenes de la ciudad y zona que soñaban con una chance en el deporte profesional en busca de gloria deportiva y estabilidad económica. El tiempo pasó y ahora son experimentados que terminaron su recorrido con la camiseta nacional, pero que siguen brillando en Europa.
Solé, a los 33 años, logró con Perugia de Italia el título de la Champions League cuyo Final Four se disputó en Lodz, Polonia.
El equipo italiano venció por 3 a 2 en la final al Warta Zawiercie de Polonia en la final y de esta manera el rosarino junto a Agustín Loser se convirtieron en los primeros argentinos que ganan esta competencia en más de 20 años desde que Pablo Meana lo hizo en 2004 con el Lokomotiv de Rusia. También estuvo el preparador físico Sebastián Carotti.
Además, el Jastrzebski Wegiel dirigido por Marcelo Méndez y con Luciano Vicentin y Juan Finoli en su plantel terminó tercero al vencer por 3-1 (25-22; 26-24; 20-25 y 25-18) al Halkbank Ankara.
Perugia logró asegurarse un lugar entre los grandes de Europa de la actualidad. Desde su primer título, la Supercopa de Italia conquistada en 2018, ganó al menos un trofeo por temporada hasta la fecha. Hace apenas un año, con el propio Solé en el plantel, también se había consagrado campeón de la Liga Italiana.
Crer fue campeón en República Checa
A los 35 años Pablo Crer se mantiene en alto nivel competitivo y en los últimos días se coronó campeón de la Copa de República Checa con VK Lvi Praga al ganar 3-1 en la final ante Karlovarsko.
El central tuvo una excelente actuación tanto en la semifinal (9 puntos, 60% ataque y 3 bloqueos) como en la final (9, 60% y 4) y ayudó a su equipo a quedarse con el primer puesto.
También se coronó en la Liga checa en esta temporada.